Persisten las denuncias de las trabajadoras por despidos injustificados y discriminación ante el Secretario General en Aguascalientes de la CROM, Jesús Enrique Ramírez Pérez, quien esta mañana recibió una llamada de un nuevo trabajador de la NISSAN en la entidad a quien se le despidió por haber sido parte del movimiento de exigencia de derechos y mejores condiciones laborales.
“Juan Antonio Casillas me llamó esta mañana, él trabajó los últimos 10 años en la industria automotriz y trata de reincorporarse en alguna empresa, hoy me dice que fue a una entrevista y le negaron el trabajo hasta que no corroboraran en NISSAN las razones reales de su despido”, explicó que el trasfondo está en que quienes representan a esta empresa es la misma central obrera y el mismo buffet de abogados (Gustavo Martínez Estébanez) que no buscan el interés de los trabajadores sino de mantener buena imagen con las empresas por conveniencia.
En ese sentido Ramírez Pérez reprochó que se continúen con este tipo de arbitrariedades al acabar con los empleos sólo por una venganza ante la exigencia de mejores condiciones laborales y mejores condiciones de vida para sus familias. “Exigimos otra vez la intervención del Gobierno del Estado para que estas arbitrariedades no se den, desde la CROM lo hemos dicho estamos en favor de la productividad, y si no se está dando el nivel están en su derecho de despedirlos, pero no así por exigir mejores condiciones que por derecho constitucional se tiene todo trabajador”.
Como agrupación sindical comprometida plenamente a la equidad de género y los derechos de las mujeres, la CROM se ha fortalecido en capacitaciones para la defensa laboral, “hemos sido firmes en la CROM con nuestras más de 2 mil agremiadas, sobre la defensa de sus derechos ante cualquier violación a los mismos, enfatizando siempre en que la capacidad no se mide por el género sino por la mente y la preparación”.
El líder sindical informó que en los últimos meses se han recibido denuncias de las trabajadoras, de que en la planta NISSAN Aguascalientes hay líneas reservadas sólo para hombres, dejando espacios precarios para las mujeres o bien acortando los espacios de trabajo para ellas.
Aunado a los despidos por estar embarazadas, “no es posible que a estas alturas se siga afectando a las mujeres de esta manera, no lo vamos a permitir, ellas son una base importante para la economía de nuestro estado, por eso uno de nuestros retos emprendidos desde que implementamos el Nuevo Sindicalismo ha sido el acercamiento, la escucha, el diálogo permanente hacia sus inquietudes y necesidades, generando un vínculo de confianza con las trabajadoras”.
En 2018, la ONU Mujeres informó que, en México, la brecha salarial se mantenía en un 30 por ciento con respecto a los varones, además de un alto nivel de discriminación laboral y violencia sexual en sus centros de trabajo. La CROM ha atendido de 2 a 3 casos de esta naturaleza por año, principalmente en las empresas japonesas, donde los supervisores abusan de su jerarquía para
acosar y violentar a las trabajadoras. “Estamos muy preocupados porque vivimos en una sociedad predominantemente machista, y las trabajadoras son aún más afectadas por temor a perder sus empleos”, por ello se firmó un convenio de colaboración con un Bufete de Abogadas especialistas en violencia laboral y doméstica para atender con mayor profesionalidad estos casos.
En los casos atendidos en la CROM de violencia laboral, el secretario general aseguró que se han resuelto directamente con la empresa con el despido de los acosadores en busca de evitar una propagación de la violencia en el centro de trabajo.
Finalmente, Ramírez Pérez puntualizó la importancia de mantener una relación en equipo CROM-agremiados-patrones para lograr que toda discriminación en las líneas de producción sea eliminada, recordándose a las trabajadoras cromistas que todas y todos somos iguales ante la ley sin importar nuestro sexo
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