La Confederación de Organizaciones Sindicales y la Brigada de Radiocomunicación de Aguascalientes quieren anunciar a la sociedad Hidrocálida que el Objetivo fue cumplido: Se Entregaron 18 toneladas de ayuda a los hermanos damnificados en Oaxaca.
Del 19 al 28 de septiembre la Brigada de Radiocomunicación de Aguascalientes a través de su Coordinador General, Óscar Enrique Aranda Palacios y la representante estatal de dicha organización Verónica Leal Trujillo, realizó una colecta en la Ciudad de Aguascalientes por medio de varias vías, entre los donantes agradecemos la participación de empresarios, obreros, Movimiento Mimo, los Colegios: Marista, Esperanza, México y la Esc. Sec. Tec. No. 33, además de la ciudadanía quien de todo corazón se solidarizó en ésta causa.
De esa manera un grupo de Brigadistas, Prensa y un servidor (Oscar Ramírez Ávila, COS), viajamos el viernes 29 de Septiembre a Oaxaca y tras 27 horas de camino, estuvimos casi una semana recorriendo los lugares más recónditos de aquel estado donde no habían recibido apoyo.
Entre las comunidades beneficiadas estuvieron San Mateo del Mar, específicamente la Colonia Cuauhtemoc, San Pedro Comitancillo, Asunción Ixtaltepec, Cd. Ixtepec, Huazantlan, Unión Hidalgo, Chicapa de Castro. En la zona de morro acudimos a Sta. Cruz Hidalgo conocida como Carnero, Concepción Bamba, Rincón Bamba, Agencias de Santo Domingo Tehuantepec, La zona de Yautepec, Huchitán, San Pedro Huilotepec, Mazatán y Santa María Xadani solo por mencionar algunas.
Queremos resaltar que esta acción altruista no hubiera podido realizarse sin la cooperación de otras solidarias almas como los que nos ayudaron en nuestra estadía en Tehuantepec, entre ellos al Grupo de Fraternidad Istmeña, quienes nos apoyaron con el reparto de los víveres y a la familia Pacheco que nos abrió las puertas de su casa brindándonos hospedaje, así como a quienes hicieron posible el traslado, al Chofer José de Jesús Lujano Dueñas, a Omar Alejandro moreno Hernández, “Bolillo” propietario del camión, de igual forma a los voluntarios que nos apoyaron en todo momento tanto en el camino como en la operación de entrega de víveres: Dulce y Abril en Tehuacán, al taxista Enrique Acevedo en Oaxaca y a los que olvide mencionar mil disculpas de antemano y un fraternal y sincero gracias de corazón a todos, pues hicieron posible que la esperanza llegara hasta el último rincón.
Fue tal el éxito de dicha expedición que estamos planeando repetirla posiblemente en diciembre para donar juguetes a los muchos niños necesitados de una sonrisa para alegrar un poco su infancia interrumpida por estos desastres naturales.
Enfatizamos para concluir, que los damnificados nos recibieron de una forma muy amable y hospitalaria, dándonos miles de agradecimientos y bendiciones mismas que queremos extender a todos los hidrocálidos que donaron y decirles: Su ayuda llegó a donde tenía que llegar
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