La banda con sede en París, STICKY BOYS, han estado ganando adeptos en la carretera durante los últimos siete años, impulsados por una cosa y sólo una cosa: su amor por Rock’n’Roll de verdad.
Después de haber lanzado su aclamado álbum debut en 2012, «This is Rock’n’Roll», y a contiuación aparecer en la película Oceane (2013), los rockeros galos han ganado una gran reputación como artistas de directo, perfeccionando su arte a través de colaboraciones en el escenario con bandas tales como de Y&T, Crucified Barbara, Electric Mary o Nashville Pussy.
A pesar de tener un calendario lleno hasta los topes de actuaciones en toda Europa, estos tres salvajes hombretones se decidieron a grabar su esperado segundo álbum en septiembre de 2014. «Make Art» fue producido por su colega de siempre, Francis Casta, de los Studio Ste-Marthe y fue lanzado por el sello Listenable Records.
El pasado 2017 los parisinos sacaron a la calle su último LP titulado «Calling The Devil», un auténtico chute de adrenalina que suena por todos lados a The Clash, The Pogues, The Damned y muchas otras bandas del palo. El álbum destila una auténtica actitud punk, al más puro estilo Rancid pero sin el ska. Lo que más llama la atención es la actitud y la decisión de la banda en cada tema, decididos a crear un album repleto de hard rock con swing. Produce una gran sensación de placer cuando al escuchar un álbum, este hace que la sangre hierva y solo desees saltar, gritar, cabecear, y en definitiva, disfrutar.
Sticky Boys nunca descansan y ahora se preparan para arrasar el escenario de Salason con su incendiario directo, que llegará a Cangas do Morrazo (Pontevedra) el próximo domingo 9 de septiembre.
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